lunes, 13 de abril de 2009

cuando pienso el la paz

Nadie quiere morir
nadie quiere dejar
su cuadrito de aire,
su gota azul de cielo,
de ensueño, vital encuentro
con la tierra
Nadie quiere morir
y cada uno disfruta a su manera:
abrir una ventana al sol,
mirar caer la lluvia,
su juego entre los árboles,
perderse entre la niebla
tomar en los senderos una flor,
y llenarse las manos de colores /Hablar con los más simples
Aprender la sapiencia de los niños
y animar a los viejos, /cuando exprimen recuerdos, /empapados de lágrimas, /Recibir una carta venida desde lejos: "esto fue en primavera,/ se fueron en un barco todos los exiliados. /Los pequeños, nacidos en destierro, /tambien tenían asombro/ y cantaban canciones, /las mismas del exilio"
Poema de la poeta Colombiana fallecida Matilde Espinosa 2007

3 comentarios:

poemsia dijo...

Este poema lo escribió la gran poeta de poetas Matilde Espinosa, pienso que en Colombia su patria a la que amo entrañablemente, no le dieron el puesto que mereció tanto por sus poemas llenos de realidad y sentimiento y a su adelanto en el tiempo cuando los escribió, si no también a su poesía libre, clara y hermosa que se ocupó de todos los estados de la vida desde su lucha a traves de la palabra por los desamparados, la solidaridad con las mujeres y los niños y esa gran capacidad para entender al ser humano. Este poema fue uno de los ultimos que escribió porque ella amaba la vida a pesar de los dolores que tuvo que soportar durante sus 97 años. Este es un único homenaje que yo le rindo porque sus versos llenaron de fe y de ayuda a muchos poetas que llegaban a sus puertas en busca de su apoyo.
Matilde gracias por el legado que le diste a la humanidad.
Con amor
Clemencia

S .M.T dijo...

Desde ese cuadrito de cielo ella te está bendiciendo!

poemsia dijo...

Queridos amigos, familia, poetas y todo aquel que por fortuna para mi esté en mi camino, esta página es el compendio de muchas de las vivencias de mi día a día. Mis sueños y fracasos reflejados en los poemas y las cosas, en especial los seres que me producen alegría y esperanzas, los niños y las niñas, los animales y claro los hombres y mujeres que me regalan en sus versos parte de sus existencias
Un abrazo grande
Clemencia